apenas tengo unos minutos para escribirte antes de ir a clases.
Lo cierto es que las medicinas que te encargué ya las tenía olvidadas. Tomé sólo la mitad de lo prescrito pero seguro que tuvo que ser así.
Ayer vino Quino por casa, que ha colgado los hábitos, como tal vez sepas, aunque se ha quitado del Zen, me parece, por lo que hablaba, que no se ha quitado de Rafu. Así que probablemente volverá al zafu, gracias a Rafu.
El caso es que me trajo, por fin, el nº2 de los Cuadernos de la Morejona. Muy bien, quitando algún testimonio emotivo, que vale como tal.
En mi texto hay dos erratas. Una, donde dije o quise decir: "las enseñanzas de Sócrates o Jesús fueron escritas tras su muerte", dice "las enseñanzas de Sócrates o Jesús fueron estrictas tras su muerte", lo cual también es cierto, dicho sea de paso.
Procuraré enviaros algún escrito para el siguiente, a Dharma también le debo uno y además tengo pendiente el de "Death must die" que te dije. Me gusta colaborar en los cuadernos.
Es tremendo, no sólo no tengo planes este año para ir a India, pero ni siquiera a una sessin o ninguna otra escapada semejante, sino buscarme más trabajo. Pero otros años estaba igual y acabé en Delhi auque fuera tan poco tiempo.
Me voy ya.
Un abrazo,
Joaquín.
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