Buenas tardes, noches o mañanas.
De nuevo con vosotros, a compartir este rato de reflexion, este rato en el que tratamos de fluir acompasados.
Este es un instante especial (al menos para mi y para muchos de vosotros segun me contais) que compartimos lanzando al aire las vanas identificaciones, huyendo de las elucubraciones egoicas y asentandonos en el Ser, en nuestro Ser Interior.
Cuando asidos de profunda interiorizacion, en medio de la Meditacion propiamente dicha, en nuestro cojín; o en estado Meditativo mientras escuchamos Mouna dando un paseo, por ejemplo; hacemos un trabajo de ensanchamiento de la Consciencia, de profundizacion, de expansion...
Ese trabajo es sutil pero penetrante, y profundiza en zonas a veces desconocidas para nosotros, a veces intuidas o vislumbradas en alguna ocasion que, antes, fue tan futil, tan evanescente, que nos hizo desasirnos de ella, o no ser capaces de permanecer en ella tanto como querriamos.
Tras esa profunda interiorizacion, que toma forma de viaje personal hacia la union de nuestra escindida mente, o hacia una union mayor de todos nuestros planos o dimensiones humanas, de las mas groseras a las mas sutiles, abarcando planos físicos, emocionales, psicologicos, energeticos, espirituales o casusales ... queda un trabajo que hacer de lo mas importante. Materializarlo.
Como dicen muchos grandes maestros,y como mas de uno de vosotros decis, vivimos en la tierra, aunque mas correcto seria decir entre el cielo y la tierra como dice el buen Gopala en uno de sus versos, que fluyen deliciosamente acompañados por la música de David Gonzalez. Sutiles y profundos ambos.
Y, por eso que estamos en esta esfera, en este samsara maravilloso, (pues cada dia nos enseña mas y mas para estar mas cerca de nuestro Ser Interior, de nuestro Testigo inmutable), es que tenemos el deber, pero tambien la oportunidad de materializarlo y hacerlo nuestro en el día a día.
Tras un profundo indagar, tras una profunda interiorizacion, tras una profunda meditacion, tan solo esta hecho medio trabajo.
El otro medio es hacerlo nuestro y practicarlo, pues si no, esa experiencia maravillosa quedaría coja. Y es ahí donde comienza esa materializacion y donde es importante tener el arrojo, asi como la paciencia, el cariño y comprension con nosotros y con los otros, (que no son mas que algo mas de nosotros, asi como nosotros somos algo mas de ellos, pues todos, al final, somos UNO) para hacerlo nuestro y convertirlo en nuestro Ser.
No olvidemos, pues, de Meditar. Pero tampoco olvidemos llevarlo a la práctica en la medida de nuestras posibilidades, que cada dia, con constancia, seran aun mas amplias.
La conexion es profunda. El Amor es profundo. El Ser es profundo. Todos lo somos. Y cada dia mas en unión con nosotros mismos y con lo que todo lo puebla. Nuestro maravilloso Universo.
Un abrazo. Y sigamos compartiendo y brindandonos y brindando un poco mas de nuestra luz. Porque algo no es nuestro hasta que no lo entregamos.
Ruben Revillas
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