Hola compañer@s.
El sábado pasado una avanzadilla de intrépidos caminantes nos adentramos por la "cañá" del cuerno para tocar nuestro cielo más próximo. Subimos a la Torrecilla y pudimos compartir un dia frio y hermoso. Nieve, pinsapos, hielo, quejigos, sol, risas, esfuerzo, enebros, musarañas, "virgenes", respiros, reposo... De hecho creo que con lo que menos contactamos fue con la soledad (?).
Ojalá sigamos compartiendo estos caminos.
Como podeis ver, Yogasala estuvo presente y dejó su huella (limpia y respetuosa, claro)
1 comentario:
Gracias por compartir esta crónica de la excursión, y por dejar la huella de la YogaSala en el libro de visitas de la cumbre.
Publicar un comentario