He pensado añadir al programa de las Jornadas de Yoga y Meditación una breve reunión el viernes tras la cena que será servida aproximadamente a las 9. El contenido de la reunión, que tendrá lugar aproximadamente a las 10, será explicar algunos fundamentos para el sábado por la mañana temprano comenzar con la meditación sin más preámbulos.
El programa sé que parece muy extenso o intenso, pero nótese que pretende cubrir el horario. Después cada cual es libre de seguirlo de un modo más completo. En realidad no será tan agotador como pueda parecer. Si alguien necesita reposar, es lógicamente libre de hacerlo. El único obligado a cumplir todo el programa es el instructor.
Considero que, en gran medida, se trata de unas jornadas pioneras y puede convertirse en una efemérides para los asistentes. Son las primeras que organizo. Luego he recordado que durante algunos intensivos de Zen he enseñado Yoga de un modo espontáneo a quien quería aprenderlo. También en una ocasión celebramos una jornada de Zen (de la que se ocupaba un monje zen) y Yoga para el Zen (de lo que yo me ocupaba) en el Dojo Zen de Málaga.
Lo interesante es que desde el punto de vista del Zen, así como de otras escuelas de meditación budistas el Yoga se considera algo así como una especie de preámbulo para la meditación, tal como Buda lo practicó antes de dedicarse exclusivamente a la meditación.
Por su parte, en mis viajes a India, aunque he asistido a algunas meditaciones en los ámbitos de los ashrams o los centros de Yoga, sin embargo, me parecía que era como un añadido, sin conexión con las asanas o los pranayamas.
Mi propuesta viene siendo y va a ser en estas jornadas procurar establecer un Continuum entre ambas prácticas, que creo es lo que estableció Patanjali en los Yoga-Sutras, los textos fundacionales del Yoga. Por lo tanto se trata de una vuelta a la tradición y el origen, intentar retomar un conocimiento que además puede hacernos más comprensible tanto el Yoga como la Meditación y establecer un círculo virtuoso, una influencia positiva entre ambos. Asanas (ejercicios físicos) y Pranayamas (ejercicios de respiración) servirán para facilitar y profundizar en la Meditación, y ésta nos revelará aspectos tal vez novedosos de aquellos ejercicios.
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