Viendo las cifras de venta de 2012, parece que las subidas de impuestos sobre el combustible y los coches nuevos han llevado a muchos españoles a optar por moverse con dos ruedas en lugar de con cuatro.
Un precio mas asequible, consumo nulo, mitigar el impacto ambiental y el hecho de hacer ejercicio quizás sean los motivos que han originado que el año pasado se vendieron en nuestro país 780.000 bicicletas, frente a los 700.000 vehículos nuevos que fueron adquiridos por los consumidores. Esto significa un aumento del 4 por ciento en las ventas de bicicletas y una caída del 30 por ciento en la de automóviles nuevos.
Este fenómeno no parece particular de nuestro país. Si se comparan los datos de venta de bicicletas y coches nuevos durante el periodo de 2012 en los países de la Unión Europea, se puede observar que en casi todos ellos (con excepción de Bélgica y Luxemburgo) ocurre algo similar, tal y como muestra el gráfico que recoge los datos de los 27 estados miembro (salvo Chipre y Malta que no disponen de un registro de cifras al respecto).
Los datos recogidos se pueden explicar por una caída de ventas de automóviles en toda Europa registrada a principios de 2012. Un descenso que coincide con la recesión económica a nivel mundial.
Como dato curioso, esta comparación refleja que en Italia el año pasado por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial se han vendido más bicis que automóviles.
A pesar del incremento en la venta de bicicletas, a diferencia de otros países del norte de Europa, como Holanda, Bélgica o Dinamarca, España no tiene una tradición muy arraigada de su uso para desplazamientos cotidianos, mas bien eran utilizadas para hacer deporte. Aunque, según un reportaje elaborado por Lauren Frayer en NPR, esta tendencia está cambiando. Eso sí, el periodista alerta de la necesidad de implementar la seguridad vial porque nuestro país cuenta con una de las tasas de mortalidad más altas para los ciclistas de carretera que se dan en Europa.
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