Hace unos días contactó
conmigo una mamá de un bebé de 7 meses proponiéndome formar un
grupo de Yoga para Bebés. Y dije, ¿por qué no? Soy profesor de
yoga, padre de dos criaturas y puedo decir sin pudor que he
practicado ampliamente yoga con mi hijo Rama, durante sus seis años
de vida, y mi hija Ariel, nacida hace dos meses y medio (puedes leer
el relato de su nacimiento AQUÍ), se está convirtiendo en la mejor
maestra de meditación y amor incondicional que he tenido nunca,
además de una excelente manera de sanar al niño que fui y una
oportunidad de oro para conocerme mejor a través del maravilloso
espejo de sus ojos.
Debo reconocer que cuando nació Rama (lee su nacimiento AQUÍ), al ser el primero, no tenía ni idea de como integrar la práctica de yoga que venía haciendo antes de su nacimiento, y adaptarla a las nuevas circunstancias. Hubo momentos de zozobra y hasta desesperación a la hora de encontrar en el día al menos quince minutos para estar en silencio y conectar con mi respiración y mover el cuerpo. Descubrí que el yoga debe adaptarse a las circunstancias y funcionar sea cual sea la situación. Si el yoga consiste en conectarse al momento presente y fluir, aquél era un momentazo y yo quería vivirlo desde el yoga. O sea, convertir la crianza en una oportunidad de despertar espiritualmente. Desde luego seis años no bastan, y quizá no tenga fin este aprendizaje, pero qué distinto está siendo con esta segunda bebé.
He descubierto que
existen dos formas básicas de hacer yoga con bebés:
La
primera es una
urgencia diaria, y se trata de conectarte con tu propio cuerpo y
aliviarlo
del dolor y la tensión que las malas noches+la demanda masiva de
atención que el bebé reclama+las cavilaciones incesantes+la montaña rusa
emocional que la crianza acarrea (sí, los papás implicados en la crianza
consciente también nos encontramos con nuestra propia sombra, nuestros
miedos e inseguridades en este período). El caso es que es difícil
prácticar yoga(a veces incluso ir al baño) cuando cuidas de un bebé,
pero lo puedes intentar tumbando al
bebé a tu lado en alguna mantita y tú tratas, en ocasiones en tiempos
record, de estirarte, masajearte y
moverte un poco, lo que buenamente puedas, hasta que más pronto que
tarde la bebé reclama de nuevo tu atención y entonces sólo te
queda hacer ejercicios en pareja con tu peque, que aunque el trabajo
duro, reconozcámoslo, lo haces tú, puede llegar a ser muy
divertido. Esto es lo humanamente posible, un día puedes hacer perro
boca abajo y no llegas ni a perro boca arriba* cuando ya tienes que
atender a la beba, y otro día quizá se enrolla y hasta puedes hacer
alguna torsión. Así es, y está bien así (esto también pasará).
La segunda forma de hacer
yoga con tú bebé es, en mi opinión, la más completa e
integradora, y consiste en convertir a este pequeño ser en una
meditación, la mejor de todas. Tan sólo sostenerlos en brazos,
conectar con tu propia respiración y después con la suya es una
delicia. Sentir el pulso de su corazón en tu mano mientras lo
cargas. Reconocer el vínculo de amor tan profundo que os une,
envolverlo todo con este amor, incluyendo el terrible dolor de
hombros y de espalda, quizá a las seis de la mañana, en el silencio
de la madrugada, después de una llantina, se quedan por fin
dormidos, en una paz que sólo los bebés pueden transmitir (tienes
que saber de que te hablo) y un gran sentido de intimidad y conexión
se establece con la Vida. Es sencillamente maravilloso. Doy todos los
días gracias por el privilegio de ser padre y tener la oportunidad
de vivenciar, a diario, tanta cercanía con otro ser humano, tan
completo y único como estos pequeños.
En fin, que empezamos en
mayo, si se conforma el grupo. Este el propósito de este artículo,
pues la mamá que me contactó sólo tiene otras tres mamás
interesadas, y necesitamos un mínimo de seis mamás para arrancar.
Los papás, por supuesto, son bienvenidos (ojalá se animen). Esta es
la convocatoria:
Yoga con Bebés
todos los lunes
de 18 a 19
lugar:
CENTRO CIUDADANO ALEGRÍA
DE LA HUERTA
Ciudad Jardín, Málaga
Aportación voluntaria:
20 €/mes
(30 € pareja)
contacta:
Rafael
601 26 43 46
Om Gratitud
2 comentarios:
Hola! Soy mamá de un bebe de 10 meses y dos más grandes (4 y 5).
Me gustaría hacer yoga con mi bebé...
Pero tb me gustaría hacerlo con los dos grandes...
Tenéis yoga para familias en la q pueda ir con los 3? Es q no tengo con quien dejar a los demás y aparte...es q me gustaría hacerlo con los 3.
De antemano... Muchas gracias!
Hola, Tatiana.
Una opción es nuestro yoga en familias:
http://www.iayoga.org/yoga-para-nintildeos.html
Puedes practicar yoga con tu bebé por nosotros todo bien.
Y tus hijos mayores pueden practicar al mismo tiempo en la sala contigua. Os podréis ver a través de las cristaleras.
Tal vez quieras probar.
Consulta a Mónica o a Rafael.
+Info coreo y whatsapp:
Mónica familias@iayoga.org
687 84 90 10
Rafael: rafa70va@gmail.com
Gracias y un saludo,
Joaquín.
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